‘Niña repelente’ arrasa

Margarita, la niña en cuestión

Margarita, la niña en cuestión

Poco más de un año y medio después de su aparición, la webserieNiña repelente‘ arrasa en la Red. El capítulo primero tiene ya casi cuatro millones de reproducciones en su canal de YouTube (consigue más de un millón y medio de visitas por entrega), y su cuenta en Facebook acumula más de ciento ochenta mil seguidores. Casi na.   

Margarita es una niña sevillana mu jartible, descarada, respondona y bastante repelente, la verdad. Pero tiene un puntito canalla que la ha hecho conectar con miles de seguidores en todo el mundo, cruzando fronteras con su humor andaluz y llegando allí donde otros no han podido.   

Los hermanos Manuel y José Antonio Pérez Escuderos (Mape y Jape) y el amigo de ambos, Jesús Calvo de León, son tres sevillanos que vienen del mundo informático y del sector gráfico. Cansados del panorama laboral que ahogaba su creatividad, decidieron juntarse para desarrollar un proyecto personal en el que poder dar todo lo que llevan dentro. Ellos mismos, a través de su propio estudio Impose Studio / Frikibot Magazine, se encargan del diseño, digitalización, guión, animación y doblaje de ‘Niña repelente’, la serie española internetera de animación con más proyección internacional.   

Los tres artífices de la serie (Manuel, José Antonio y Jesús)

Los tres artífices de la serie (Manuel, José Antonio y Jesús)

Margarita es una pequeña redicha e insoportable, hija de Antonio, un parado juancojones que intenta evadirse de la realidad familiar, y de Concha (todo un icono de masas), una madre depresiva y psicótica aficionada en demasía a las pastillas y los ansiolíticos. Diferentes personajes, como la abuela de la niña, la vecina y su hijo Jorge Luis («la gorda»), además de otros, completan el plantel de protagonistas que suponen un valor añadido al humor hilarante de la serie. Especial mención al capítulo de la abuela (a continuación), uno de mis favoritos.   

  

La serie figura entre los cien canales con mayor número de suscriptores de YouTube España y entre los cincuenta canales más vistos. El humor irreverente y la fina ironía andaluza se entremezclan para conformar una producción independiente más que exitosa. La iniciativa y la constancia han hecho que estos chicos se lleven al público de calle utilizando una herramienta como es Internet, entorno que muchas de las grandes productoras debería saber explotar, en lugar de andar lloriqueando por las esquinas a causa de las inmensas pérdidas que dicen tener por lo que mal llaman piratería.   

‘Niña repelente’, en lo que al tipo de humor se refiere, está a medio camino entre grandes producciones extranjeras como ‘South Park’, ‘Family guy’, ‘Los Simpsons’ o ‘Bob Esponja’, con aderezos imprescindibles de la cultura popular de aquí. Las escenas recogen la esencia de la idiosincrasia patria, mezclando situaciones cotidianas de nuestra cultura con un ingenio descarado que bien merecería los más altos premios al mejor guión original. Especial mención, otra vez, al capítulo de la playa (a continuación), otro de mis favoritos.  

 

‘Niña repelente’ no ha hecho multimillonarios a sus creadores (por ahora), pero poco a poco va obteniendo réditos importantes; y eso es saber aprovechar el tirón de la Red. Por ejemplo, los últimos capítulos llevan el patrocinio de la empresa Movistar, genialmente plasmado, por cierto. Asimismo, la red de microblogging Twitter tiene la exclusividad de cada nuevo capítulo durante un mes. También el merchandising de la serie, de venta en la tienda de la web de Frikibotestá teniendo un éxito inconmensurable entre los internautas. Los pedidos de camisetas, sudaderas o llaveros llueven desde todos los países del mundo.   

Frikibot Magazine ha comenzado también a producir otras series web como ‘Se te va la pinza‘, ‘Cocinero Loren‘ o ‘Paco y Migue, críticos de penísculas‘, con estilos diferentes e intentando llegar a un público más amplio.  Es curioso, además, ver como, al igual que en las grandes series televisivas, el estilo y el diseño de los personajes de ‘Niña repelente’ ha variado sustancialmente (a mejor), resultando en un dibujo más profesional y mejor definido. El vídeo siguiente se corresponde con el primer capítulo de la serie.  

  

En el año 2004, la serie animada ‘Cálico Electrónico’ inauguró el fenómeno de las webserie españolas. Posteriormente, producciones como ‘Malviviendo’ o ‘Qué vida más triste’ (llevada a la televisión y luego reconvertida en ‘Descarga completa’, otra vez como serie web) han conseguido acaparar millones de visitantes y una audiencia que para sí la quisiera ‘Operación Triunfo 2011’. El futuro pasa por renovarse o morir, y esto lo deberían saber aquellos que se han quedado anclados en los formatos tradicionales. Internet ya no admite esas tonterías, o aceptas el nuevo modelo de negocio o no te quejes y vete yéndote.   

¿Para cuándo un largometraje de ‘Niña repelente’? Quién sabe, pero igual no tenemos que esperar mucho; o sí… Como diría Margarita: «¡que te calle ya, carva, cagona, que ereh una cagona!«.

Érase una vez un cacharro feo, pero resultón

Cybiko Classic

Cybiko Classic

Corría el año 2000, aquel final de milenio que tantos quebraderos de cabeza trajo a los programadores informáticos, cuando apareció en los mercados ruso, japo y yanqui una suerte de aparato infernal destinado al público adolescente. Cybiko era una amalgama de PDA, Handheld PC, reproductor de MP3, aparato de mensajería y consola portátil de videojuegos. Un mucho abarcar y poco apretar que la fortuna quiso que desapareciera solamente tres años después. La culpa de su escaso éxito: una buena idea mal desarrollada.

Cybiko fue un proyecto del ingeniero armenio, afincado en Rusia, David Yang y su socio capitalista, un hombre de negocios norteamericano llamado Donald Wisniewski. La idea consistía en crear un instrumento tecnológico que imitara a los productos nipones de empresas como Bandai o Takara, a la sazón vanguardistas en estas lides y con una cuota de mercado más que interesante.

Este extraño gadget tuvo dos modelos diferentes, el conocido como Cybiko Classic (con dos versiones en su haber) y la secuela denominada Cybiko Xtreme. Una pantalla LCD sin retroiluminación producía una imagen bastante pobre y de baja calidad, y el teclado QWERTY era impracticable. Las capacidades que se quisieron potenciar al dirigir su estrategia a los adolescentes fueron la posibilidad de jugar a sencillos juegos de vídeo y, sobre todo, la de poder chatear entre dispositivos Cybiko en enormes salas de encuentro que permitían la conexión de hasta 99 máquinas.

Cybiko Classic y Cybiko Xtreme

Cybiko Classic y Cybiko Xtreme

La mayor baza de Cybiko fue la inclusión de capacidades de cliente y servidor de una conexión de radio bidireccional. Al encender el instrumento, éste era capaz de localizar a otros Cybiko en un radio de 300 metros (sin obstáculos de por medio). Entre los dispositivos conectados cabía la posibilidad de enviar mensajes de chat en tiempo real o, también, de jugar a juegos en red. Además, cada Cybiko hacía de repetidor hacia otros dispositivos en zonas más alejadas, por lo que, por ejemplo, una población con el suficiente número de instrumentos conectados podría haber estado cubierta en su totalidad por una red Cibyko.

Evidentemente, esta característica apasionó a los púberes del momento, ya que podían conectarse con cientos de personas a la redonda de una manera instantánea y, muy importante, totalmente gratuita. Asimismo, los juegos de Cybiko se podían descargar gratis de su página web (ya desaparecida), y las capacidades de conexión vía radio permitían jugar partidas multijugador con personas a decenas de metros de distancia.

Cybiko también fue una máquina social. Los usuarios tenían la oportunidad de rellenar su perfil con datos personales que, después, compartían con otros usuarios a modo de red radiofónica 2.0, y también permitía realizar búsquedas de amigos entre los Cybiko detectados, filtrando los resultados mediante variables parametrizadas de los propios perfiles.

Las primeras ventas de Cybiko fueron un rotundo éxito. Como decíamos, las intenciones de emular a los juguetes electrónicos japonés dieron buen resultado, no así la de desbancar a Game Boy. El mercado nipón era muy jugoso, y hasta el mismo nombre de Cybiko fue ideado como algo que resultara agradable a los oídos de los japoneses. El vídeo del anuncio publicitario del cacharro (a continuación) es un claro ejemplo de cómo de serio se tomó el tema de la imitación de la industria del sol naciente. Es un vídeo en perfecto inglés pero con un acento y un estilo japonés que, francamente, sobrepasa los límites de la sobreactuación friqui.

El precio de Cybiko (129 dólares americanos) también ayudó a masificar su venta. Por otro lado, el sistema operativo del aparato (CyOS) era propietario de la empresa que lo fabricaba, sin embargo desde un primer momento se liberaron las especificaciones y herramientas necesarias para desarrollar aplicaciones y juegos para él. Además, era posible la programación directa en lenguaje C y en CyBasic (una versión del BASIC de toda la vida adaptada a las características de Cybiko), lo que propició la aparición de centenares de aplicaciones de terceros que, previa descarga de Internet, se podían incluir en el pequeño ordenador de mano.

La segunda revisión de Cybiko Classic incluyo la reproducción de MP3 e hizo aparecer una ranura para tarjetas del tipo SmartMedia con una capacidad máxima de 64 MB, por lo que los problemas de espacio iniciales, unidos a la nueva aparición de la música, se veían parcialmente solventados. La aparición de Cybiko Xtreme trajo consigo importantes mejoras internas (RAM, ROM, sistema operativo y capa de teclado) y también externas: diseño más ergonómico y reducido, más amplitud de búsqueda de dispositivos, micrófono y salida de audio. Así mismo, este segundo aparato permite la opción de compartir archivos (juegos, música, documentos, etcétera) entre usuarios; una especie de P2P del pasado con características de servidor de ficheros FTP.

Pero Cybiko se desinfló en pocos años. Todas sus buenas características fueron apisonadas por el cúmulo de defectos que llevaba aparejados. La pantalla LCD no retroiluminada ofrecía una calidad pésima de gráficos. Además, su teclado QWERTY tenía las teclas tan pequeñas que resultaba prácticamente imposible pulsarlas con los dedos, por lo que Cybiko venía acompañado de un lápiz de plástico para utilizar como puntero a la hora de escribir: el colmo de la velocidad mecanográfica tenía que ser aquello para chatear.

Por otro lado, las características que permitían a Cybiko conectarse a Internet (como el correo electrónico) obligaban a enchufar físicamente el aparato a un ordenador vía USB, con lo que de poco servía en la calle. Por último, comentar que la conexión de este ingenio a un PC, así como la actualización de juegos y programas, era poco menos que una misión imposible: continuos errores, cuelgues del sistema, desconexiones fortuitas, etcétera.

La empresa cerró definitivamente su web en el año 2006, pero tres años antes ya había dejado de producir el invento a causa del drástico descenso de ventas. La bajada del precio de los teléfonos móviles y su masificación entre los adolescentes jugó también un importante papel en la desaparición de Cybiko. A pesar de las últimas correcciones de diseño, el modelo aún se parecía más a un voluminoso walkie-talkie y, por supuesto, no gozaba de las prestaciones que un celular podía ofrecer a los jóvenes usuarios, incluso siendo más barato su uso.

Finalmente, la compañía fue vendida a la empresa francesa French Mobile Game. Desde su nacimiento hasta su muerte, Cybiko tuvo sólo tres años y medio para demostrar de lo que era posible, y no lo consiguió.

Actualmente todavía se puede adquirir algún Cybiko en webs de subastas o de venta de segunda mano, aunque probablemente a un precio más caro de lo que costaba en su origen. Y es que este gadget se ha convertido en artículo geek de coleccionista, y muchos retrofriquis se divierten jugueteando con él o desarrollando programas para él. Existen algunos sitios web de fanáticos nostálgicos que siguen en marcha, destacando sobre todos ellos Planet Cybiko, con una participación internauta nada desdeñable.

David Yang, el inventor de Cybiko, trabaja hoy día en la reconocida empresa ABBYY, el proveedor líder de software de conversión de documentos, captura de datos y lingüístico. Además, forma parte del consejo de administración de la misma. Su ex socio, Donald Wisniewski, está trabajando actualmente como director ejecutivo de CyberHull, una empresa especializada en la transformación de datos, contenidos, nuevos medios e iniciativas de publicación.

Me encantaría tener un Cybiko. Esa manía que tengo de guardar cacharros inservibles, coño.

Certificados de sitio seguro

Logo SG

Logo SG

Security Guardian (www.security-guardian.com) es un servicio online, proporcionado por la empresa del mismo nombre, que permite certificar la seguridad, la privacidad y la confianza de un sitio web por medio de un sello visible en la página. ¿Es tu web segura? Te llevarías más de una sorpresa.

El sistema de funcionamiento en sencillo y totalmente transparente al propietario de la web. Una vez contratado el servicio y registrado como usuario, los chicos de Security Guardian se encargan de realizar una auditoría profunda sobre la empresa. Se verifican los datos de contacto y la identidad de sus propietarios, el número de identificación fiscal, los números de teléfono y las direcciones de correo electrónico, entre otros aspectos. Este proceso de verificación asegurará que la empresa esté claramente identificada y que su dueño es quien dice ser, para proporcionar a sus clientes o visitantes la garantía que el sitio web es lícito y está identificado y autenticado.

Posteriormente se procesa una prueba de intrusión. Al más puro estilo hacker, y con herramientas de escaneado de vulnerabilidades, se realiza una serie de ataques controlados al sitio web, con el objeto de detectar problemas de seguridad, como podría ser un servidor web antiguo o mal configurado, permisos erróneos en directorios importantes, fallos críticos de programación, etcétera. Entre las diversas pruebas realizadas podríamos destacar algunas como la inyección SQL de formularios, el Cross-site scripting (XSS), peticiones camufladas de HTTP Smuggling y el conocido como ataque «punto punto barra» (Path Traversal), entre otros. Todos estos exámenes son completamente transparentes para el sitio analizado, y se proporciona, posteriormente, un informe detallado con el tipo y el número de vulnerabilidades encontradas.

En función de los resultados, se muestra el sello de seguridad en la web, certificando la confianza del sitio. Este sello mejora la percepción de seguridad de los visitantes y de los potenciales clientes, produciendo un aumento en la demanda del servicio y en las ventas. Concretamente, desde Security Guardian aseguran que el incremento de negocio es de un 12%, nada más y nada menos.

El servicio de certificación de portal web seguro efectúa pruebas de intrusión de forma periódica, para asegurar de manera continua la seguridad de un portal. Además, esta actuación reduce el número de ataques recibidos, ya que muestra a los potenciales atacantes que el lugar está siendo monitorizado y que no tiene vulnerabilidades críticas.

Security Guardian está disponible en cuatro versiones: Smalll Business, Lite, Enterprise y Scan on Demand. Cada empresa puede elegir la que más le convenga en función de las prestaciones de cada una de ellas, que van desde el servicio a pequeñas compañías o particulares con venta en línea, hasta organizaciones con necesidades de un alto nivel de seguridad.

Importantes y conocidas compañías como D-Link, 3scale Networks o el Gran Teatro del Liceo de Barcelona han depositado su confianza en Security Guardian. Desde luego, una solución muy interesante para todos aquellos sitios web en los que la seguridad de sus clientes o visitantes sea algo importante.



De Facebook, ataúdes, muerte e hijos de puta

Kathleen Edwards

Kathleen Edwards

Kathleen Edwards es una niña norteamericana de siete años afectada, en fase terminal, por la enfermedad de Huntington, el trastorno genético neuropsiquiátrico y hereditario conocido antiguamente como el baile de San Vito. La enfermedad ya se cobró hace poco la vida de su madre, Laura Edwards, a la temprana edad de 24 años. El padre de la pequeña, Robert, contempla como la vida de su hija se desvanece poco a poco entre sus brazos, mientras el inexorable final se acerca a sus vidas. 

Si bastante tiene esta familia con soportar el peso de la peor de las desgracias, hace poco más de tres meses hubo de sufrir un agravio mayor. Los Edwards son vecinos de Scott y Jennifer Petkov, calificados ahora como la pareja más cruel del país, por los medios más políticamente correctos, y como dos auténticos hijos de la gran puta y desechos humanos putrefactos, por el resto. 

Jennifer y Scott Petkov (vía Fox 2 News)

Jennifer y Scott Petkov (vía Fox 2 News)

Una fiesta de cumpleaños en casa de los Edwards tuvo la culpa de todo. Jennifer Petkov envió un SMS a sus vecinos para tantear la posibilidad de que sus hijos acudieran a la celebración. El destino quiso que aquel mensaje no llegara correctamente, no se leyera a tiempo o se olvidara su respuesta. Desde aquel entonces, los Petkov tomaron la no invitación como una afrenta y comenzaron los acosos a la pobre niña enferma. 

Jennifer Petkov creó un grupo en Facebook para mofarse de la pequeña y reírse de su cercana muerte. Colgó fotografías de la madre de Kathleen rodeada por los brazos huesudos de la representación de la muerte y, también, otras de la cara de la niña sobre dos tibias cruzadas, a guisa de bandera pirata macabra. 

Siniestros fotomontajes creados por Jennifer Petkov (vía Fox 2 News)

Siniestros fotomontajes creados por Jennifer Petkov (vía Fox 2 News)

El odio irracional de esta pareja hacia Kathleen Edwards llegó al punto de estacionar frente a su casa una camioneta con un ataúd negro, en su parte trasera descubierta, en el que se podían leer mensajes como Death proof o Death machine. En el siguiente vídeo (en inglés) se puede ver la mencionada camioneta, así como fotografías de la cuenta de Facebook y una pequeña y vomitiva entrevista a la principal acosadora (Jennifer Petkov) donde se jacta de sus enfermos actos y se pone en evidencia como integrante de la raza humana. La mujer llega a contestar a la reportera de la Fox que todo lo han hecho por «satisfacción personal» y, asevera en inglés algo que no he sido capaz de traducir más allá de lo literal: «Because it rubs their ass raw«. El significado debe de ser horrible, porque la periodista contesta «eso suena enfermo». (Aprovecho para hacer un llamamiento a los agudos lectores de este blog con el fin de que envíen el significado de esa expresión a través los comentarios).

 

En fenómeno saltó de los medios televisivos a Internet, donde se convirtió en un asunto viral que corrió de blog en blog y de web en web. Enseguida se generaron protestas online en contra de esta pareja de anormales, y los propios vecinos de la zona donde viven salieron a la calle para protestar por tales actitudes tan reprobables. Sus actos de humillación se volvieron contra ellos. Facebook floreció de páginas a favor de la chiquilla y en contra de los Petkov, millones de personas de todo el mundo transmitieron su apoyo a la familia, representantes de Toys ‘R’ Us regalaron multitud de juguetes a la niña y los responsables del espectáculo ‘Disney On Ice’ la convidaron como invitada de honor a uno de sus pases. Recibieron, también, miles de dólares desde todos los lugares del planeta para ayudar a la muchacha. 

Como no podía ser de otra manera, los Anónimos congregados en 4chan declararon acciones inmediatas contra la pareja. Y eso ya da más miedo. Jennifer Petkov salió al paso enseguida, eliminando el grupo de Facebook, pidiendo públicas disculpas a la niña y a su familia y manifestando que no era su intención que una disputa vecinal se convirtiera en una bola de nieve tan grande. Vamos, que le vieron las orejas al lobo y se acojonaron con todas las letras. Además de bastardos, cobardes. 

Scott Petkov fue sancionado en su trabajo nada más conocerse los hechos. Al día siguiente retiró la camioneta con el ataúd por miedo a perder el empleo. Su mujer aseguraba entre lágrimas que su marido es un buen hombre, que no tiene nada que ver en todo esto. Un hijo de ambos tuvo que ser enviado a casa desde el colegio por una pelea con un compañero. Una familia que se deshace a causa de una madre desequilibrada. 

Y es que la tal Jennifer esta no debe de ser trigo limpio. Resulta que, posteriormente, apareció la noticia de que sería inculpada por intentar atropellar a otra vecina con intención de matarla. La vecina, Tana Boling, asegura que sucedió cuando cruzaba la calle para hablar con Rebecca Rose, la abuela de Kathleen Edwards. Jennifer Petkov fue acusada de asalto con arma peligrosa y de conducción temeraria. Su familia corrió con el gasto del diez por ciento de la fianza para sacarla de la cárcel. En fin, que menuda individua. 

Los psicólogos aseguran que realmente ella no tiene remordimientos por sus actos y que necesita ayuda inmediata. Mientras tanto, el padre de la pequeña Kathleen Edwards ha hecho un llamamiento a la familia Petkov: «Déjennos solos, eso es todo lo que queremos. No hace falta ningún comentario más acerca de nuestra hija“, ha solicitado. Que así sea.

Cosas que nuestros nietos no entenderán nunca

Un post de hace dos años en el blog Sticky Comics desató la controversia. Fue una entrada, con un único comentario, que alguien volcó en Digg, consiguiendo 5.857 votos y casi 800 comentarios en el agregador de noticias más importante del mundo (Dios me perdone, y Menéame también).

Viñeta 1 de Sticky Comics

Viñeta 1 de Sticky Comics

Este garabato refleja con total rotundidad cuatro elementos y prácticas que pasarán de moda cuando, los que somos padres, seamos abuelos. Los relojes analógicos, la escritura en cursiva, los videograbadores y los periódicos son agua pasada.

Dicen que el tiempo vuela, pero nadie nos ha concretado por qué vuela tan rápido. El mundo de la tecnología es un querer alcanzar y no poder, y si alguien se despista un segundo pierde el tren para siempre. Para siempre.

A nosotros nos parece impensable vivir sin televisión, teléfono o microondas y, de la misma manera, a nuestros nietos les resultará prácticamente inconcebible subsistir sin aparatos o técnicas que hoy no somos capaces siquiera de conjeturar. ¿Cómo no vamos a pensar que les resulte extraño un diario de papel?

Los vídeos VHS están prácticamente muertos, y los medios de información de celulosa migran sus tendenciosas noticias al mundo 2.0. La cursiva proviene de la escritura a mano apresurada; de hecho, la palabra ‘cursiva’ desciende de la latina ‘curro’ (‘correr’), por ser el tipo de letra obtenida al escribir con cierta agilidad. Los relojes de agujas dejarán de tener sentido cuando los nostálgicos de lo analógico vayan desapareciendo y las nuevas generaciones desechen cualquier mecanismo que no se menee a golpe de microchip y sistema binario.

Esta entrada de Sticky Comics generó una secuela (imagen siguiente), a modo de más cosas que nuestros nietos nunca entenderán. En este caso, se alzaban como tecnologías moribundas la escritura completa de ciertas palabras, los teléfonos inalámbricos, los discos compactos y las tarjetas postales.

Viñeta 2 de Sticky Comics

Viñeta 2 de Sticky Comics

¿Hasta que punto tiene esto su puntito de exactitud? Está claro que el mundo del SMS revolucionó la escritura de los jóvenes, escritura que se ha trasladado a Internet y al ámbito del mundo real. Lo mismo ocurre con las tarjetas postales, que caen en desuso a marchas forzadas por culpa de teléfonos celulares y dispositivos móviles. Los discos compactos son consumibles de los que cualquiera con dos dedos de frente aprecia su extinción, y los teléfonos inalámbricos sucumbirán en favor de móviles de escritorio.

Pero lo que seguro no entenderán nuestros nietos es imágenes que caricaturicen lo que sus propios nietos no entenderán, porque la tecnología avanzará en sus vidas de manera tan apresurada desde que nazcan, que sentirán la vorágine desarrolladora como algo normal, lógico e inherente a su propia existencia.

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