La serie de juegos de Horacio del ZX Spectrum
Programado entre Beam Software (luego Melbourne House) y Psion Software (en España distribuido y traducido por Investrónica) era una burda copia (ahora lo llaman inspiración) del ‘Pac-Man‘ de Namco. Horacio debía coger todas las estrellas de la pantalla para superar el nivel. Unas campanas, a modo de bonus, le permitían zamparse a los enemigos sin miramientos durante unos segundos. Lo dicho, un auténtico clon de Pac-Man.
Lo bueno de los juegos de Horacio es que eran «gratis», es decir, solían regalarlos al comprar el aparato, es por ello que son títulos que los que vivieron su infancia en los ochenta recordarán a buen seguro. Psion también se encargó, entre otras cosas, del desarrollo de la cinta ‘Horizons‘ (‘Horizontes’ en España), otro regalo de bienvenida de Sinclair al comprar su «gomas» y que traía títulos inolvidables como ‘El Muro’ (‘Thro’ the Wall‘), un juego tipo breakout, esto es, un machacaladrillos de los de toda la vida, pero que a los spectrumianos nos llenó horas y horas de nuestro tiempo libre.
El segundo de los juegos de la trilogía, también aparecido en 1982, fue ‘Horace goes skiing‘ (‘Horacio esquiador’). Este dechado de tecnología punta estaba dividido en dos fases claramente diferenciadas. En la primera de ellas, Horacio debía cruzar una carretera, esquivando vehículos de todo tipo, para recoger unos esquís. Esta parte del juego recuerda (imita descaradamente) al ‘Frogger‘ de Sega, lo que nos lleva a pensar que no se rompían mucho la cabeza para idear guiones originales. En la segunda de las fases, Horacio caía por una colina nevada y debía sortear los banderines y otros obstáculos hasta llegar a la meta. Y vuelta a empezar, en modo bucle, cada vez más rápido.
Los gráficos son impresionantes, el sonido demoledor, el grácil movimiento de subir la adrenalina; el Spectrum daba para mucho más, pero en esta serie no se preocuparon lo más mínimo de sacarle todo su partido. Sin embargo, Horacio siempre permanecerá en nuestros corazones frikis por el hecho de habernos otorgado tantos cientos de horas de diversión digital.
El tercero de los títulos, de 1983, era ‘Horace & the spiders‘ (‘Horacio y las arañas’), en el que nuestro amigo debía enfrentarse, a lo largo de tres fases, a unas terribles arañas carnívoras, saltando, balanceándose entre lianas y creando agujeros trampa para que los arácnidos cayeran en ellos. Para no perder la costumbre del plagio o copia, el tercer nivel de este tercer juego recuerda poderosamente al estilo de juego de ‘Lode Runner‘, un arcade de plataformas también de 1983.
La trilogía original estuvo apunto de convertirse en una saga de cuatro en 1985, cuando fue anunciada una secuela que se llamaría ‘Horace to the rescue‘ (‘Horacio al rescate’). Sin embargo, este juego nunca llegó a ver la luz. Decían los chismorreos de la época que William Tang estaba muy delicado de salud y no pudo proseguir su trabajo, aunque esto nunca ha sido confirmado.
Diez años después, en 1995, los fans de Horacio recibieron un sorpresón cuando Michael Ware, de la compañía de desarrollo británica Proteus Developments, programó una cuarta entrega titulada ‘Horace in the Mystic Woods‘ originalmente para las PDA Psion Series 3. Era un juego de plataformas muy similar (igual) al clásico ‘Manic Miner‘, por aquello de continuar con el estilo de imitación de otros juegos de la época. Sería 15 años después, en 2010, cuando el programador independiente Bob Smith codificara este último título para ZX Spectrum, convirtiéndolo ya en un clásico por sí mismo de emuladores y máquinas físicas de 8 bits.
Nuestro Horacio ha realizado posteriores cameos en videojuegos de diversa índole. El más cercano es del año 2003, en el que apareció en el juego ‘Dog’s Life’ para PlayStation 2 como parte de un cartel de una tienda llamada Horace’s Ski Shop. Y es que Horacio es mucho Horacio. Nos retrotrae a aquellos dulces años del software ochobitero, cuando esperábamos ansiosos el momento de jugar mientras escuchábamos los estridentes sonidos de carga del Spectrum. Por cierto, ahora que digo esto, los dos primeros títulos de Horacio, el de la glotonería y el del experto esquiador, aparecieron también en formato ROM para la ZX Interface 2. Afortunados aquellos que no habían de esperar para cargar y cuyos oídos no debían soportar aquel sinvivir.
[…] La serie de juegos de Horacio del ZX Spectrum […]
Estos juegos marcaron mi infancia y la de muchos niños. En mi corazón ochentero siempre habrá un huequito para Horacio y sus arañas.